Lo primero que vimos de
Santorini cuando el ferry bajó la rampa, fue el acantilado a pocos metros! Imponente!
Por suerte, estaban esperándonos del hotel que habíamos reservado. El trayecto
hasta nuestro alojamiento en Firá, capital de la isla, fue de unos 20 minutos. Como
llegamos de madrugada, tipo 1 y media, no vimos nada, solo grupos de luces que
nos hizo pensar en caseríos dispersos.
Atardecer en Firá |
Es que la isla de Santorini
es pequeña, tiene forma de media luna, pero no siempre fue así… la isla tenía
una forma circular antes de la erupción volcánica de 1450 a.C. que hizo
desaparecer el centro de la misma y solo quedó emergido la zona del cráter (es
una islita con el volcán activo todavía). La gran cantidad de lava sepultó
varias partes de la isla y formó paredes de hasta 300 m de alto, por eso el
relieve es rocoso y alto. Estuvo habitada por los minoicos desde 3.000 años
a.C.; le siguieron los dorios que llegaron en el siglo VIII a.C. y luego los
venecianos en el siglo XIII.
Firá está preparado para
recibir al turismo. Es que Santorini es la isla más visitada de toda Grecia, y
no es por su playas, sino por sus pueblos totalmente blancos que cuelgan de los
acantilados, como escurriéndose hacia el mar muy azul… realmente muy bonito! El
último terremoto que azotó a la isla fue en 1956, pero Firá fue reconstruida al
estilo tradicional y hoy se pueden ver casas cúbicas que se mezclan con las
famosas iglesias copuladas y todavía existentes viviendas trogloditas
(excavadas en la roca) con techos abovedados, formando un conjunto de extrema
belleza. Las terrazas que dan al mar, del lado de la caldera o cráter, están
llenas de hoteles, bares y restaurantes y ofrecen vistas magníficas,
principalmente en la puesta del sol.
Iglesia en Oia |
El primer día salimos a
explorar el pueblo y ver el famoso volcán, llegamos hasta unas escaleras que
con condujeron al puertito de Firá que está 270 m más abajo. Había dos cruceros
inmensos fondeados. Con lanchas rápidas bajan a los pasajeros. En nuestro
descenso por los casi 600 escalones, nos encontrábamos cada tanto, con grupos
de mulas que suben desde el puerto a los cruceristas hasta lo alto del
acantilado a conocer Firá. Las vistas son divinas! Para volver utilizamos el
funicular, ni pensar de subir 600 escalones!
La isla está muy bien
comunicada con un servicio de ómnibus que salen desde el centro. Nos habían
recomendado conocer la playa de Kamari, del otro lado de la isla, así que
tomamos el ómnibus y en 20 minutos llegamos. Alquilamos una sombrilla y nos
instalamos por el resto de la tarde. Esta playa tiene olas fuertes, agua clara,
media fría al entrar pero después es una delicia, ya que la temperatura exterior
es bastante alta. La arena, mezclada con canto rodado, es negra. Nos quedamos
como hasta las 6 de la tarde y luego volvimos a Firá en ómnibus y transbordamos
en otro que nos llevó a Oia, un pueblito en el norte de Santorini, muy famoso
por sus hoteles, buenos restaurantes, más chiquito y exclusivo que Firá (y más
claro) y cuando se visita la isla, hay que ir sí o sí a ver la puesta del sol
aquí. Así que llegamos a Oia como cientos de otros turistas a disfrutar del
lugar y un atardecer mágico! No había lugar en todas las terrazas, la gente
copaba todo, miles de fotos, el sol grandote y naranja y exactamente a las 8,40
de la tarde se escondió detrás de una isla y cuando desapareció todo el mundo
aplaudió como diciendo "misión cumplida"! En Oia también se pueden
ver las casitas blancas y las iglesias de cúpula azul. En toda la isla hay más
de 250 iglesias, muy parecidas, cúpula azul y altos campanarios, ya que están
presentes la Iglesia Católica y la Iglesia Cristiana Ortodoxa.
Mousaka |
Volvimos en ómnibus a Firá,
nos bañamos y salimos a cenar "mousaka", comida típica griegra, que
se prepara en un bol de cerámica, tiene papas, berenjenas, carne picada y salsa
bechamel, todo bien condimentado, riquísimo! Los platos griegos son deliciosos,
muy condimentados, anoche cenamos "estofado de vegetales" que
consiste en un morrón y un tomate relleno con arroz bien condimentado,
buenísimo! También pedimos un "estofado de cordero con papas" que
tenía una salsita para chuparse los dedos! Todo acompañado por vino griego de
la casa… por supuesto! En todos los rincones de la isla hay parras plantadas y
vimos varias bodegas. Nos llamó la atención que los parrales no están elevados,
no tienen ninguna estructura, son bajos y el tronco tiene forma circular. Las
plantas están cargadas de uva que se apoyan directamente en el suelo.
El segundo día en Santorini
fuimos al yacimiento arqueológico de "Akrotiri" donde se puede
observar las ruinas de una antigua ciudad minoica que quedó sepultada con la
erupción del año 1.450 a.C. Después de otra erupción, en el año 1866,
arqueólogos franceses descubrieron aquí vasijas minoicas, pero recién en 1967
salió a la luz la ciudad completa maravillosamente conservada tras haber
permanecido sepultada por aprox. 3.500 años bajo la ceniza volcánica. Todo el
complejo, que está protegido con un techo moderno, incluye casas de hasta 3
pisos del siglo XVI a.C., grandes vasijas que usaban para conservar alimentos,
molino, sistema de alcantarillado, plaza, etc. En varias construcciones se han
encontrado frescos con colores perfectamente conservados que fueron trasladados
al Museo Arqueológico de Firá y al de Atenas. No se han encontrado restos
humanos ni de animales, lo que hace pensar a los investigadores que los
habitantes escaparon antes de la gran erupción. Muy interesante!
Playa Roja |
Como estaba cerca de
Akrotiri, fuimos caminando (aprox 1 km) a una playa llamada "playa roja"
que consiste en una pequeña bahía de aguas calmas y transparentes, que choca
con un gran acantilado rojo. La arena también es negra y no hay mucha playa.
Nos quedamos un poco porque era medio día, no había sombra, así que después de
un baño, decidimos partir para otra playa más organizada. Para eso tomamos un
nuevo ómnibus y bajamos en playa Perívolos, también de arena negra, mar bastante
calmo, agua con una temperatura super agradable y aquí nos quedamos el resto
del a tarde. Volvimos a Firá y luego de un baño, fuimos a ver el atardecer a
pocos metros del hotel y caminar por las callecitas del pueblito. Todo muy
lindo! El paisaje maravilloso!
Última mañana en Santorini
hicimos algo muy importante que es tomar unos mates al lado de la pequeña
piscina del hotel y a la sombrita. Temprano, el sol ya está super caliente. Ahora
estamos viajando en un ferry rápido que salió de Santorini a las 13,30 y llegará
al puerto de El Pireo, Atenas, a las 18 hs aprox. Atenas, la última escala de
nuestro viaje….
Atardecer en Firá |
Qué maravilla, cuando nosotras fuimos no tuvimos la oportunidad de conocer tanto porque bajamos del crucero y a las 3 o 4 horas debíamos regresar al barco. Ustedes han disfrutado mucho más.
ResponderEliminar